¿Cuál es el papel más importante, el del docente o el del estudiante?

 Hola a todos, cuanto tiempo desde la última vez que nos hemos visto, ¿verdad?

Hoy os escribo para hablaros sobre aquellas personas que, al fin y al cabo, conforman una clase de ELE. En este sentido, tenemos a los profesores y a los alumnos. 

¿Qué pensáis, es más importante la función del profesor o la del estudiante? Desde mi punto de vista todos son importantes, conforman un pack que tiene que ir junto sí o sí. Todos tienen un papel importante y hacen una función dentro de ese conjunto inseparable. Yo como docente, tengo que formar estudiantes cada vez más autónomos, tal y como dijo Alonso (2006), el docente debe de contar con unas habilidades organizadoras que determinará el resultado de la clase. ¿Cuáles son esas habilidades, es decir, qué habilidades debe de tener un buen profesor?

Para contestar a esta pregunta os invito a ver mi siguiente publicación donde comentaré y hablaré sobre esas habilidades docentes y la gestión del aula de ELE. 

Volviendo al tema anterior, recientemente he leído una reflexión de una autora llamada Maria Montessori (1970), que dijo: “La mayor señal de éxito para un profesor es poder decir: los alumnos están ahora trabajando como si yo no existiera”. Esta reflexión me hizo pensar mucho sobre mi papel como docente en las clases. ¿Es verdad lo que dice, qué pensáis? Pues desde mi experiencia puedo decir que muchas veces los estudiantes son capaces de trabajar de forma autónoma y autodidacta, de tal manera que con su propio conocimiento y con la ayuda de los compañeros son capaces de aprender. En una clase, el papel del docente debería de ser secundario y, por lo tanto, el que más se destaca es el del estudiante. A través, de actividades en grupo o simplemente en parejas ellos mismos pueden dirigir las actividades (siempre con la dirección y las indicaciones previas del docente, pero ellos mismos son capaces). Esto se puede aplicar a edades muy tempranos donde con clases por estaciones ellos mismos van a las actividades y las realizan de forma conjunta. Por otro lado, en las clases de ELE para adultos o adolescentes con que el profesor haga unas indicaciones o explicaciones previas, ellos serán capaces de seguir con el resto de las actividades. 

No obstante, el profesor deberá intervenir igualmente para corregir lo que estén haciendo o simplemente llevar un seguimiento. Yo normalmente intento darles cierta libertad, al principio dedico 15 min para explicar un contenido nuevo y posteriormente por equipos ellos realizan las actividades. Pueden ser actividades grupales de redacción, de expresión oral mezclado con escrita o simplemente solo oral. Depende siempre de qué actividad va mejor para qué contenido y eso se va encontrando con la práctica. 

La frustración de que una actividad no funcione nunca es la solución, somos personas y no siempre puede salir bien, lo que tenemos que aprovechar es la oportunidad de descartar esa actividad y encontrar una que funcione mejor y cuando eso ocurra guardarla como un tesoro porque te sacará de muchos apuros en el futuro jajajaja.

Espero que os haya gustado mi aportación y os veo pronto en mi siguiente publicación.

 

Besos,

 

Diana